Sanciones más estrictas y plataforma única: el nuevo plan de orden y seguridad para la Policía Nacional

En su visita a la región de Junín, el ministro del Interior, Vicente Tiburcio, anunció que el Ejecutivo aprobará un Decreto Supremo que actualizará el cuadro de sanciones aplicables a los policías involucrados en delitos flagrantes o conductas irregulares. El anuncio forma parte de una estrategia más amplia orientada a robustecer la integridad y la eficacia operativa de la Policía Nacional.

Durante su intervención, Tiburcio enfatizó la decisión del gobierno de adoptar medidas contundentes frente a los efectivos que infrinjan la ley. “Ya tenemos un Decreto Supremo en vigencia con una tabla de sanciones para ser más efectivos. Como bien se ha anunciado, aquí no hay espacio para ningún policía que está al margen de la ley. Todo policía que está al margen de la ley inmediatamente tiene que ser retirado de la institución. Esa es política de Gobierno”, afirmó el ministro.

El funcionario añadió que, además del componente sancionador, el Ejecutivo está trabajando en un plan de orden y seguridad destinado a fortalecer la capacidad operativa de la Policía Nacional. Subrayó la importancia de aprovechar herramientas como los mapas del delito para adaptar las estrategias a las particularidades de cada localidad. “Aquí se tiene que ejecutar un tema de una plataforma única… el plan que nosotros tenemos está el fortalecimiento, lo que es la especialidad de orden y seguridad, prevención del delito y investigación, pero todo fortalecido con lo que es la inteligencia”, señaló.

Tiburcio destacó que la visión gubernamental no se limita a sanciones administrativas, sino que busca un marco integral que permita a la Policía responder de manera más eficiente a los retos de seguridad. En esa línea, recalcó la necesidad de coordinar esfuerzos entre las distintas dependencias y de asegurar que las comisarías cuenten con herramientas analíticas y tecnológicas para anticipar incidentes y optimizar la respuesta policial.

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La gira por Junín incluyó un recorrido por instalaciones policiales y un encuentro con autoridades locales y representantes de la sociedad civil. En cada intervención, el ministro dejó claro que la prioridad es restablecer la confianza ciudadana en las fuerzas del orden y fortalecer la gobernanza de seguridad a través de políticas claras, transparentes y aplicables de inmediato.

Con este marco, el Gobierno pretende enviar un mensaje inequívoco: la integridad de las fuerzas policiales es indispensable para la convivencia y el desarrollo de las comunidades, y cualquier desviación de la norma deberá ser identificada y corregida con mecanismos eficaces.