Delia Espinoza: “Siempre he enfrentado la delincuencia” tras ausentarse de la audiencia de la JNJ

En una mañana tensa, la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, ofreció una conferencia de prensa desde la sede del Ministerio Público minutos después de no presentarse a la audiencia pública de la Junta Nacional de Justicia (JNJ), la instancia que evalúa su posible suspensión por un periodo de seis meses. Espinoza explicó que su ausencia no implica eludir el proceso, y subrayó que su equipo ha actuado en el marco estricto de la defensa y del debido proceso.

Con voz firme, la fiscal recordó su trayectoria de más de 30 años enfrentando a la criminalidad. “En mis 30 años de experiencia, siempre he enfrentado la delincuencia. Una de las características de quienes cometen delitos o están bajo investigación es atacar; lo comprendemos”, declaró, haciendo alusión a las presuntas estrategias de sus críticos y a la presión mediática que rodea el caso.

La fiscal detalló que ha brindado a la JNJ “el tiempo y el espacio necesarios” para que se respondan los diversos recursos escritos presentados como parte de su defensa. Afirmó que el proceso, desde su inicio, ha estado, en su opinión, plagado de irregularidades y consideró que la diligencia de la JNJ no ha respondido a las formalidades requeridas. Denunció, además, la falta de notificación adecuada que, según su parecer, ha acompañado el procedimiento.

Espinoza fue más allá al cuestionar la transparencia del proceso: aseguró que, de manera “exprés”, el pleno de la JNJ pretende apartarla del cargo en las próximas horas, calificando la maniobra como inconstitucional. Aseguró que el manejo de la situación por parte de la judicatura podría estar involucrando conflictos de interés entre magistrados, lo que, en su visión, deteriora la confianza en el proceso.

La fiscal también criticó lo que considera un desequilibrio en las reglas del juego entre fiscalía y la JNJ. “No hay juego limpio en la JNJ”, afirmó, y advirtió sobre posibles delitos atribuidos a los magistrados, como avocamiento indebido, abuso de autoridad y prevaricato. Estas declaraciones, que ya habían generado debate, se difundieron en un tono de firme defensa institucional.

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En su intervención, Espinoza advirtió que, si las decisiones anunciadas se concretan, podría interpretarse como un sometimiento del Ministerio Público a la JNJ, una dinámica que, en su opinión, socava la autonomía de ambas instituciones y podría acarrear consecuencias para el Poder Judicial en su conjunto. “Los dos somos igualmente autónomos, y esa autonomía es fundamental para el equilibrio institucional”, enfatizó, al detallar su preocupación ante el impacto de cualquier resolución expedita.

La conferencia terminó sin anunciar nuevos plazos o medidas específicas, pero dejó claro que Espinoza mantiene su compromiso con el marco legal y con la defensa de su trayectoria profesional. El próximo paso en este caso dependerá del comité de la JNJ y de las respuestas a los recursos presentados por la fiscalía. Expertos consultados señalan que el caso podría marcar un precedente sobre la relación entre control disciplinario y autonomía institucional en el sistema judicial del país.