Capturan en Ica al venezolano sospechoso del a asesinar del periodista Gastón Medina.

En un operativo coordinado por la Fiscalía y la Policía Nacional del Perú, la madrugada de este viernes fue detenido Pablo Echeverría, un ciudadano venezolano, en el marco de la investigación que busca esclarecer el crimen del periodista Gastón Medina, ocurrido el pasado 20 de enero en Ica. Echeverría es sindicado como presunto autor del homicidio, y aunque las autoridades apuntan a que actuó por encargo, no se descarta que también haya participado directamente en el atentado que dejó a Medina en la muerte.

La operación se llevó a cabo en cumplimiento de órdenes judiciales y contó con el apoyo de fuerzas policiales, en un entorno de máxima reserva para evitar filtraciones en una investigación que continúa avanzando con cautela. Hasta ahora, se sabe que Echeverría habría tenido motivaciones relacionadas con supuestos intereses económicos y de poder en la región, pero el móvil exacto aún está en análisis.

¿Por qué mataron a Gastón Medina?

El fallecimiento de Medina, conocido por su trabajo en Cadena Sur TV y por su valiente denuncia de irregularidades en el Gobierno Regional de Ica, representa una triste llamada de atención sobre la escalada de violencia contra periodistas en el país. Medina, de 61 años, había establecido un papel fundamental en exponer corrupción y favoritismos, lo que le valió amenazas constantes desde 2022.

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Su familia recuerda que, en los últimos meses, Medina fue víctima de múltiples amenazas: recibió cartuchos de dinamita, mensajes anónimos, pintas en su vivienda y hasta arreglos florales adornados con balas. Pese a sus denuncias formales y a la gravedad de la situación, ni la Policía ni la Fiscalía le brindaron protección efectiva, situación que genera indignación en su entorno.

Su pareja, Nelly Nathalie Caico Sánchez, expresó con angustia: "No hay justicia si callamos". La madre de su hijo de 10 años teme por su vida y ha denunciado que la investigación parece estar paralizada, lo que refuerza la percepción de que existe un muro de silencio en torno al caso.

El clima de hostilidad contra la prensa en aumento

El asesinato de Medina no es un hecho aislado en un panorama de creciente violencia contra periodistas en Perú. La Asociación Nacional de Periodistas registró 392 ataques en 2024, un alarmante indicador de los riesgos que enfrentan quienes ejercen el periodismo en condiciones cada vez más peligrosas. La denuncia constante de irregularidades, la exposición de corrupción y la lucha por la transparencia parecen haber convertido a Medina en un objetivo.

Hasta ahora, la fiscalía mantiene la reserva en las investigaciones sobre los autores intelectuales y las motivaciones de fondo en este crimen. La familia y colegas de Medina han llegado a Lima para exigir justicia, pues consideran que su muerte evidencia una profunda problemática de impunidad y amenazas que aún azotan a quienes informan y luchan por la verdad.