Renovación de la flota del Metropolitano se postergará hasta 2026, anuncia ATU.

La llegada de una nueva flota de buses al sistema de transporte del Metropolitano se verá retrasada, según confirmó el presidente de la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU), David Hernández. Aunque en meses pasados se había señalado que la renovación comenzaría en la segunda mitad de 2025, ahora se ha precisado que esta implementación recién ocurrirá en los primeros meses de 2026.

Desde hace varias semanas, los usuarios del Metropolitano han manifestado su preocupación ante el evidente deterioro de las unidades que circulan a diario. Los buses, que cumplieron 15 años de operación —siendo que su vida útil original era de 12 años— se han convertido en motivo de queja y en fuente de incidentes en varias ocasiones. La situación ha motivado la protesta de pasajeros y la exigencia de autoridades y expertos para que se garantice la renovación total de la flota lo antes posible.

En un inicio, la ATU había anunciado que la llegada de nuevas unidades se daría en el segundo semestre del 2025, pero esa fecha ha sido ajustada a los primeros meses del siguiente año. Para explicar el proceso, fue el propio Hernández quien detalló los pasos que se llevan a cabo para formalizar la adquisición de los nuevos buses, tarea que requiere de una serie de procesos administrativos y financieros.

“Ya estamos trabajando en la elaboración de una adenda al contrato con los concesionarios del sistema y con apoyo del Ministerio de Economía y Finanzas para facilitar la compra de los nuevos buses de manera paulatina”, explicó Hernández en una entrevista con Canal N. Añadió que actualmente se coordina con el Banco Mundial, que ha aprobado un crédito destinado a financiar la renovación y mejorar las condiciones para la adquisición de los vehículos.

El proceso, sin embargo, no será inmediato. Hernández especificó que, tras finalizar la adenda, que estima no superar los cuatro meses, será necesario realizar el pedido formal de los buses, instancia que puede tardar hasta ocho meses en concretarse. Esto significa que, siempre que los procedimientos avancen sin contratiempos, las unidades nuevas comenzarían a llegar en aproximadamente ese período, en los primeros meses de 2026.

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“Estamos trabajando con rapidez, sosteniendo casi dos reuniones semanales con los concesionarios para abordar los problemas relacionados a la renovación del parco vehicular”, aseguró Hernández. Agregó que, aunque el proceso administrativo sea largo, la prioridad del sistema de transporte sigue siendo mejorar la calidad del servicio y ofrecer a los usuarios buses en condiciones óptimas.

En conclusión, el atraso en la llegada de la nueva flota evidencia la complejidad técnica y administrativa que implica renovar un sistema tan importante y utilizado por miles de peruanos cada día. La expectativa es que, en los próximos meses, se puedan completar los trámites y comenzar a modernizar el servicio, reduciendo los riesgos y mejorando las condiciones de viaje para todos los pasajeros.