La verdad histórica: Tratados que respaldan la soberanía peruana desmiente las acusaciones de Gustavo Petro.

La Cancillería del Perú reaccionó con firmeza ante las acusaciones del mandatario de Colombia, expresando su rechazo categórico. El ministro de Relaciones Exteriores, Elmer Schialer, aclaró que el Perú no ha invadido ni un solo centímetro del territorio colombiano. Por otro lado, el Parlamento peruano reafirmó su apoyo al Gobierno, basándose en los compromisos internacionales que respaldan su postura.

Las tensiones entre Perú y Colombia han resurgido tras las declaraciones del presidente colombiano, Gustavo Petro, quien ha acusado a Perú de "copar" territorio colombiano mediante la creación del nuevo distrito de Santa Rosa de Loreto. Según Petro, esta acción unilateral podría amenazar la existencia de Leticia como un puerto comercial en el Amazonas. En su cuenta de X, afirmó que su gobierno "usará antes que nada, los pasos diplomáticos para defender la soberanía nacional".

Sin embargo, la historia ofrece una perspectiva diferente. Los tratados firmados entre ambos países, el Tratado de Límites y Navegación Fluvial de 1922 y el Protocolo de Amistad y Cooperación de 1934, establecieron límites claros y fueron ratificados por los respectivos Congresos. Según estos acuerdos, el lado izquierdo del río Amazonas pertenece a Colombia y el derecho a Perú, lo que refuerza la legitimidad del nuevo distrito.

El reciente establecimiento del distrito de Santa Rosa de Loreto, oficializado con la Ley 32403 el 3 de julio, responde a las demandas de la población local y se ha realizado dentro de los marcos legales establecidos. El canciller peruano, Elmer Schialer, expresó que "el Perú ha creado correctamente el distrito de Santa Rosa en suelo peruano, no se ha tocado un milímetro de territorio colombiano". Este mensaje fue respaldado por el Congreso peruano, que rechazó las acusaciones de Petro y reafirmó la soberanía peruana en la región.

El exministro de Relaciones Exteriores, Miguel Rodríguez Mackay, también criticó a Petro, sugiriendo que sus declaraciones podrían ser una "cortina de humo" para desviar la atención de problemas internos en Colombia. "Un tratado como Salomón-Lozano de 1922 y el protocolo de 1934 son instrumentos jurídicos de naturaleza pétrea", afirmó, defendiendo la posición de Perú en este conflicto.

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La controversia no solo pone a prueba las relaciones bilaterales, sino que también destaca la importancia de los tratados internacionales en la resolución de disputas territoriales. La creación del distrito de Santa Rosa de Loreto se enmarca en el respeto a estos acuerdos, y el gobierno peruano reafirma su compromiso con la soberanía y la integridad territorial.