Gestión del transporte a Machu Picchu presenta deficiencias, advierte la Contraloría
- owenvalencia20
- 19 sept
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La Contraloría General de la República ha puesto bajo la lupa la gestión del servicio de transporte turístico que conecta Machu Picchu Pueblo con el santuario histórico, tras detectar una serie de irregularidades que podrían afectar la continuidad y la calidad del servicio. El informe, que evalúa la intervención de la Municipalidad Provincial de Urubamba, señala que el proceso para la adjudicación del servicio estuvo marcado por una serie de deficiencias que no garantizan la transparencia ni la eficiencia operativa esperadas en un corredor de alta demanda turística.
Entre los hallazgos más relevantes, los auditores destacan que la Municipalidad Provincial de Urubamba contrató, sin licitación formal, a una empresa para cubrir el servicio. Posteriormente, el municipio optó por la figura de desabastecimiento y adjudicó la buena pro directamente a la empresa Inversiones Sumac Ayllu San Antonio de Torontoy. Este giro contractual se da en un contexto de frustrado proceso licitatorio que siguió a la terminación del contrato con Consettur Machu Picchu, generando dudas sobre la continuidad del servicio para los visitantes.
El informe también advierte que el plan de contingencia aprobado para el servicio presenta una serie de anomalías que comprometen la continuidad y la calidad del transporte hacia el santuario. En particular, se observa que no se detallan de forma operativa elementos esenciales como la forma de venta de boletos y los mecanismos de fiscalización y recaudación del dinero recaudado en las taquillas y plataformas virtuales.
“No detalla cómo se ha calculado los montos de la tarifa ni tampoco cómo implementará y operará la Municipalidad Provincial de Urubamba el cobro de dichas tarifas; ni cómo la municipalidad realizará dicha recaudación y custodia”, subraya el informe. Y añade: “Por otro lado, no se menciona la forma y modo como se hará efectiva la venta de boletos, hecho que constituye una afectación al servicio”.
Un hecho adicional que agrava la situación es que, pese a haber vencido el contrato con Consettur Machu Picchu, la empresa siguió operando el 11 de septiembre de este año sin autorización formal. En ese día se registró el desplazamiento de 20 buses en la ruta Machu Picchu Pueblo-Santuario, mientras que la nueva concesionaria, Inversiones Sumac Ayllu San Antonio de Torontoy, no tenía ninguna unidad operando en la ruta.

El informe también revela un desfase entre la contratación directa y la prestación real del servicio: la empresa ganadora habría ofrecido cubrir la ruta con 18 buses, número menor a los 24 buses que actualmente atienden la demanda en la zona. Este desequilibrio plantea interrogantes sobre la capacidad efectiva de respuesta ante la alta afluencia de visitantes y la continuidad del servicio en temporadas pico.
En respuesta a estas observaciones, la Contraloría recomienda revisar con urgencia los criterios de contratación y adjudicación, reforzar los mecanismos de control y fiscalización del servicio, y establecer protocolos claros para la venta de boletos y la recaudación de tarifas, con una salvaguarda de fondos y una trazabilidad de las operaciones. Además, propone evaluar la necesidad de ajustar la flota disponible para evitar desabastecimientos y garantizar la calidad de la experiencia turística hacia Machu Picchu.
La Municipalidad Provincial de Urubamba, al recibir las recomendaciones, deberá realizar las correcciones necesarias para alinear la gestión del transporte turístico con estándares de transparencia, eficiencia y servicio al visitante, asegurando que la experiencia de quienes llegan al santuario histórico sea segura, fluida y bien organizada.




