Galarreta: la presencia de personal de confianza en la sede es parte del trabajo

En una declaración centrada en la defensa de la operatividad partidaria, Luis Galarreta, secretario general de Fuerza Popular (FP), respondió al reportaje que denunció la presunta presencia de trabajadores vinculados a la bancada fujimorista realizando actividades partidarias en la sede del grupo durante el horario laboral. Galarreta negó la existencia de “trabajadores fantasmas” y sostuvo que la naturaleza de los cargos ejercidos por el personal de FP implica, de manera establecida, horarios y responsabilidades acordes con la labor de coordinación política.

El líder de FP explicó que los empleados señalados, entre ellos Jorge Llerena Portugal y Geraly Ulloa Depaz, son considerados “trabajadores de confianza”. Según su interpretación, este tipo de cargo no está sujeto a horarios rígidos como los de planta, y su función exige flexibilidad para cumplir con las tareas de coordinación que el congresista encomiende desde la sede partidaria. “Si yo tengo un trabajador y le digo ‘necesito que vayas al partido a coordinar con otras personas’ es porque es parte del trabajo aquí y en todo el mundo”, afirmó en Canal N.

Galarreta señaló que el reportaje incluye casos específicos, como el de la congresista Auristela Obando, quien habría negado conocer a un trabajador vinculado. El vocero aclaró que, según su lectura, Obando posteriormente dio un giro y reconoció la relación. En cuanto a la trabajadora Geraly Ulloa, a quien no se le identifica de forma directa en la Comisión VRAEM, el dirigente sugirió que la confusión podría deberse a la diferencia entre personal de planta y personal de confianza, y a la transparencia variable entre ambos grupos.

Respecto a la negativa de Ulloa a responder preguntas al medio, Galarreta sostuvo que existe una circular interna del Congreso que prohíbe a trabajadores y funcionarios brindar opiniones o entrevistas a la prensa, señalando que la institución busca mantener la adecuada separación entre la labor política y el contacto directo con los medios. En su lectura, mientras los empleados no estén realizando actividades de ocio, fuera de la función pública o involucrados en negocios privados, su labor de coordinación política encaja dentro del marco legal.

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El secretario general añadió que la labor de los cargos de confianza puede implicar trabajar más horas que el personal con horarios fijos, ya que la coordinación política y la relación con distintos actores demandan una presencia y una disponibilidad extensivas. A partir de esta visión, afirmó que no hay ilegalidad en que un congresista requiera la participación de su personal en la sede partidaria para la coordinación de actividades vinculadas a su labor legislativa y política.

En el cierre de la entrevista, Galarreta reiteró su defensa de la figura de los trabajadores de confianza dentro del marco normativo del Congreso y de la práctica habitual de los equipos políticos en todo el mundo, subrayando que su posición está sustentada en el objetivo de asegurar una gestión partidaria efectiva y coordinada.