Embajadores advierten que comentario de Boluarte podría afectar la inversión en Chancay

La presidenta Dina Boluarte pronunció hace unos días comentarios sobre la reacción de Estados Unidos ante la inauguración del puerto de Chancay, dirigidos a un público de empresarios iberoamericanos. En un contexto de optimismo sobre la inversión y el desarrollo logístico, Boluarte afirmó que “sé que a muchos, y sobre todo al presidente (Donald) Trump, no le ha gustado mucho que inauguremos el puerto de Chancay”. Además, aseguró haber conversado con el presidente Joe Biden en el marco de APEC 2023 sobre una posible reunión futura con el presidente Trump.

Diversos embajadores peruanos fueron consultados sobre el alcance de estas palabras. El embajador César Pareja señaló que, pese a la afirmación de la presidenta de que no habría “ningún problema internacional” derivado de su comentario, la mención de un posible contencioso entre Washington y Lima debe ser atendida con cuidado para no generar interpretaciones negativas entre inversionistas. Pareja subrayó que el puerto de Chancay debe ser presentado con un enfoque “exclusivamente positivo” y sin enmarcarlo en tensiones geopolíticas.

El embajador Hugo Palma fue más contundente: describió el pronunciamiento como “pésimo” y “muy difícil de entender”, señalando que no había razón para mencionar una percepción ya conocida públicamente frente a potenciales inversores. “Ha sido pésimo. No le ha hecho ningún favor al Perú y no se ha hecho ningún favor a ella ni a las posibilidades de inversión. ¿Cuál era el objeto de decir que al presidente (de Estados Unidos) no le había gustado? Es algo que ya se sabía”, comentó Palma.

Palma añadió una crítica mayor sobre la confianza que, a su juicio, afecta al país. “El Perú ofrece montones de posibilidades de inversión, pero lo que no puede ofrecer es confianza”, afirmó, aludiendo al índice de integridad y citando que el país ocupa el puesto 127 en el ranking mundial de corrupción. Señaló que la situación podría dificultar cambios positivos si persiste la percepción de inestabilidad institucional.

Publicidad

Las declaraciones oficiales de la Cancillería indican una vigilancia ante posibles comunicaciones formales desde Washington. En paralelo, analistas y representantes diplomáticos señalan que, si bien las palabras de la jefa de Estado pueden resonar en la arena internacional, lo crucial para el clima de inversiones es la consistencia de políticas y la transparencia institucional.