El director del Pronacej revela posibles complicidades internas en la fuga de internos en Maranguita.

La reciente evasión de seis internos venezolanos en el Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación de Lima, conocido como Maranguita, ha generado alarma en el sistema de justicia juvenil del país. Frente a esta situación, Francisco Naquira, al frente del Programa Nacional de Centros Juveniles (Pronacej), no dudó en expresar su preocupación, admitiendo que las primeras investigaciones apuntan a una posible complicidad del personal en el interior del establecimiento.

Tras realizar una evaluación preliminar de los hechos, Naquira afirmó que “hemos visto materiales y hemos percibido que podría existir una participación consciente, un aparente descuido intencional por parte del personal que tiene contacto directo con los adolescentes”. En sus declaraciones, resaltó que “nos hemos demorado unas horas en el interior y pudimos detectar indicios que sugieren una posible complicidad. No es simplemente una cuestión de negligencia, sino que hay sospechas de una implicancia activa”.

El funcionario explicó que, ante estos indicios, las autoridades actuaron de inmediato. Se dio aviso tanto a la Policía Nacional como al Ministerio Público y a peritos especializados para esclarecer lo ocurrido. “No es común que seis personas de manera coordinada y en el mismo momento planifiquen una fuga, por lo que consideramos que hay una clara participación interna”, sostuvo Naquira con tono firme.

Los internos prófugos son ciudadanos venezolanos, de los cuales tres tienen 17 años, uno 19 y dos 18 años. Todos cumplen sentencias entre cuatro y cinco años de prisión. La Policía Nacional ya ha iniciado un operativo a nivel nacional para su pronta recaptura, y en las próximas horas se intensificarán los esfuerzos para dar con ellos.

Naquira expresó su preocupación por lo sucedido, manifestando que la reacción inicial fue de indignación. “Desde casa, la gente puede percibir claramente que esto no fue solo negligencia, sino que hubo una falta de cuidado por parte del personal del centro. Es un hecho que no podemos permitirnos”, afirmó. Además, aseguró que todos los trabajadores de servicio en el centro están siendo sometidos a diligencias y que no revelaría aún cuántos estarían implicados, pero dejó en claro que “esto no puede quedar impune”.

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El director también hizo referencia a la coincidencia de la fuga justo en un momento en que se anunciaban medidas para mejorar el sistema penitenciario y las condiciones de los centros juveniles en todo el país. “Nos parece extraño, no hay casualidades en esto”, puntualizó. En ese sentido, no descartó que, si las investigaciones confirman irregularidades, el programa pueda sufrir cambios profundos para optimizar procedimientos y fortalecer la seguridad en los centros.

Para Naquira, aceptar una reorganización interna sería una medida necesaria si se detectan fallas, pero también no dudó en manifestar su disposición a poner su cargo a disposición si la responsabilidad recae en fallos administrativos o de gestión. “Es un cargo de confianza, y si la investigación determina que hubo errores, no tendría problema en renunciar”, indicó.

Por otro lado, la Policía Nacional y el Ministerio Público confirmaron que ya ordenaron la detención preliminar de nueve trabajadores del centro, presuntamente involucrados en el escape. La información fue proporcionada por Juan Carlos Guerra, abogado de los detenidos, quien añadió que las investigaciones continúan para esclarecer todos los hechos y determinar responsabilidades.