¿Candidato presidencial? Mario Vizcarra y su compleja relación con la justicia.

Mario Vizcarra Cornejo, hermano del expresidente Martín Vizcarra, ha emergido como un contendiente inesperado en la contienda electoral peruana, logrando un notable segundo lugar en la reciente encuesta de Ipsos, donde comparte un 7% de las preferencias con la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori. Este ascenso en las encuestas se produce en un contexto complicado, ya que su hermano, el exmandatario, enfrenta múltiples inhabilitaciones que le impiden postularse a cargos públicos.

La visibilidad política de Mario Vizcarra ha aumentado considerablemente, especialmente al aparecer junto a su hermano en eventos proselitistas, lo que podría explicar su reciente popularidad en las encuestas. Sin embargo, Mario no es ajeno a los problemas legales. En marzo de 2021, la Fiscalía de Tacna solicitó su comparecencia con restricciones, así como detención domiciliaria para César Vizcarra, otro de los hermanos del exmandatario, en el marco de una investigación por presuntos delitos de peculado doloso y colusión agravada, relacionados con la organización criminal “Los saqueadores de Ilabaya”.

Según informes del Tercer Despacho de la Fiscalía Anticorrupción de Tacna, los hermanos Vizcarra estarían implicados en un esquema de alquiler de maquinarias con funcionarios de la Municipalidad Distrital de Ilabaya, lo que habría resultado en sobrecostos por un monto que ronda los cinco millones de soles en obras de construcción de defensas ribereñas en 2018. Además, Panorama reportó que tres empresas vinculadas a amigos de Mario Vizcarra recibieron bonos del fondo MiVivienda por un total de 9 millones de soles entre 2009 y 2018, durante el gobierno de su hermano.

Mario Vizcarra, ingeniero de profesión, ha estado ligado a empresas familiares como CyM Vizcarra SAC y Agrotécnica Estuquiña. Esta última fue utilizada para contratar a Martín Vizcarra, buscando demostrar arraigo laboral en los procesos penales que enfrenta el exmandatario, quien está siendo investigado por cohecho pasivo propio debido a presuntos sobornos recibidos durante su gestión como gobernador regional de Moquegua entre 2011 y 2014.

En su papel de operador político, Mario ha mantenido un perfil bajo pero activo en las campañas de su hermano. Desde su posición como jefe de campaña en 2006 y su participación en la campaña de 2010 para la gobernación regional, ahora se encuentra más involucrado que nunca, especialmente tras las inhabilitaciones de Martín Vizcarra que lo excluyen de las elecciones de 2026.

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Recientemente, Mario fue designado miembro de la Comisión Política Nacional del partido Perú Primero, lo que refuerza las especulaciones sobre su posible candidatura presidencial. Luis Miguel Caya, exconsejero regional, describe a Mario como un “político natural” que podría estar preparándose para asumir un rol más prominente en el panorama político peruano. “Si gana las elecciones, su gobierno sería conducido por el ‘Lagarto’”, advierte Caya, sugiriendo que Martín Vizcarra seguiría influyendo desde las sombras.

El especialista en derecho electoral, José Tello, señala que el “endose” de votos de Martín hacia Mario ya se está materializando, observando un aumento significativo en la visibilidad política de Mario. “Una persona no sube así nomás 7 puntos porcentuales de la noche a la mañana”, afirma Tello, quien añade que la consanguinidad puede jugar a favor de Mario en su búsqueda por la presidencia.

Con la reciente encuesta mostrando a Mario Vizcarra en una posición competitiva, se abre un escenario electoral que podría alterar la dinámica política en Perú, desafiando a otros candidatos como Carlos Álvarez y Phillip Butters.