Alerta en San Juan de Lurigancho: más de 20 perros mueren por comida envenenada en la vía pública
- owenvalencia20
- 17 sept
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Vecinos del distrito de San Juan de Lurigancho (SJL) expresaron su preocupación ante lo que califican como un envenenamiento masivo de perros en calles y parques. De acuerdo con reportes recogidos por medios locales, al menos 20 mascotas han muerto en las últimas seis semanas tras ingerir comida aparentemente contaminada depositada en la vía pública.
La información divulgada por América Noticias señala que las mascotas fallecidas habrían consumido restos de comida, entre ellos piezas de pollo, mezclados con sustancias venenosas. Los dueños describen escenas de convulsiones poco después de la ingestión y, en la mayoría de los casos, la muerte ocurriría antes de que pudieran recibir asistencia veterinaria.
Una de las vecinas afectadas relató que “personas inescrupulosas” colocan restos de comida en la acera y en áreas verdes, con la intención de dañar a los animales. Otra propietaria, que pidió reserva de identidad, afirmó que la preocupación es constante: “No sabemos si mañana será nuestro perro o el de otro vecino el que caiga”.
Los denunciantes subrayan que la cifra podría seguir aumentando si no se identifican y sancionan a los responsables. Reclamaron mayor presencia de Serenazgo y de la Policía en las zonas donde se han hallado estos alimentos envenenados y piden medidas ejemplares frente a lo que describen como una crueldad intolerable.

Las autoridades no han emitido un comunicado oficial con números actualizados ni con un perfil de posibles sospechosos, según fuentes consultadas. En este marco, los dueños de mascotas hacen un llamado a extremar precauciones: evitar que los perros ingieran cualquier alimento dejado en la vía pública y mantener a los animales bajo supervisión constante durante las caminatas y visitas a parques.
Especialistas en salud animal recomiendan a los dueños que, ante la sospecha de exposición, busquen atención veterinaria de inmediato, incluso ante signos leves de malestar en los animales, y que reporten cualquier hallazgo de comida sospechosa a la autoridad local para facilitar la trazabilidad de posibles responsables.




